Rebeca ha vivido una vida solitaria desde que sufrió un último desengaño. La irrupción de Pizza, una encantadora perrita que se encuentra sola y abandonada, dará un giro a su vida inesperado. Pizza, una cazadora de piel y una niña encantadora, se encargarán de que el destino de Rebeca cambie radicalmente. Cuando conozca al sexy y archiconocido piloto de moto GP Paul Stone perderá el miedo a vivir que le impedía tomar las riendas de su vida.
Siempre ando deseosa de leer algo más de Megan Maxwell por eso no dude ni un momento a la hora de coger éste libro. Con él es el tercer libro que leo suyo, y claro como tenia las expectativas tan altas porque las otras novelas me habían encantado y encima mi compañera no paraba de hablarme de él que al final no ha resultado ser como yo esperaba, con esto no quiero decir que el libro no me haya gustado simplemente hay ciertas cosas que no me han convencido, ahora veréis en la reseña lo que quiero decir.

Rebeca es una joven que tiene una vida bastante plena. Cuenta con una familia que la quiere y la apoya, aunque pocas veces estén juntos; tiene un trabajo en el que se siente a gusto, es independiente y fuerte. Pero desde que sufrió un fuerte desengaño no ha vuelto a confiar en las relaciones así que tiene una vida bastante solitaria, hasta que se tropieza con un perrito que no duda en acoger en su casa. Pizza -el nombre que Rebeca le pone a la perrita- le da alegría y parece que tras su aparición el destino la tiene preparada grandes cosas.
Rebeca aprovechando una buena oportunidad consigue un gran ascenso en su trabajo, por si esto fuera poco en las navidades (y por culpa de una cazadora) se topara con un atractivo hombre, Paul, un piloto de moto GP que hará tambalear sus convicciones con respecto a las relaciones; aunque ella lo vea como un hombre que la traerá problemas la fuerte atracción que siente hacia él será inevitable y cuando conozca a Lorena, la hija de Paul, y vea lo que las revistas no muestran de él todo tomara otro matiz.
Pero, cuando encendió el motor, volvió a mirar y observó una pequeña cara peluda y blanquecina asomar por el extremo de la caja. Era un perrillo. Sin poder resistirse apagó el motor, bajó del coche y abrió la tapa de la caja de pizza.
—Venga, pequeño, sal de ahí—murmuró sonriendo—. ¿Dónde están tus dueños?
El argumento me atrajo desde un principio, la relación entre un famoso y una chica normal, el mundo de las motos… Sin embargo la trama va mucho más allá de la historia de amor entre Paul y Rebeca, en esta ocasión Megan ha introducido algo de suspense que va muy ligado a la historia principal y da protagonismo a los personajes secundarios pero sin perder la esencia que trae consigo el género Chick-lit, siendo de este modo un libro bastante completo.

Es una historia fresca, con una narración desenfadada y natural, tiene algunos toques originales y el libro se
lee muy rápido, porque hay que reconocer que engancha. Sin embargo ha habido momentos que me han parecido superficiales por la forma en la que han sucedido, es todo como muy precipitado y eso le ha quitado realismo y emoción (al menos para mi) a la historia además de algunos obstáculos que tenían los protagonistas y se han resulto como si nada. Asimismo algunas circunstancias se me han asemejado un poco a otros libros suyos y algunas expresiones chirriaban en ciertos puntos. Como he dicho arriba no quiere decir que el libro no me haya agradado, pero si que me ha parecido el más flojo que he leído hasta el momento de la autora, tal vez también tenga algo que ver que mis expectativas fueran tan altas, ya se sabe que siempre que pasa algo así el libro no acaba cumpliéndolas.
—Rebeca.
—¿Sí?
—Quiero que sepas que has sobrepasado mi fantasía. Sudorosa y con una sonrisa que a él le volvió loco, se retiró el pelo húmedo de lacara, le besó y con picardía murmuró.
—Pues prepárate porque yo también tengo fantasías.
Los personajes son naturales pero a la vez tan perfectos en muchos sentidos que les restan credibilidad, a pesar de tener virtudes y defectos se hace algo difícil imaginarlos con vida propia (porque a ver quien encuentra a un Paul xD).

Rebeca es una chica independiente, solitaria y testaruda. Se lleva de maravilla con sus hermanos, tiene unos amigos que siempre están ahí tanto para los buenos como para los malos momentos y a Ángela, la mujer que limpia su casa y una gran amiga. Como no deja que nadie (sobre todo los hombres) traspase la barrera que ha puesto a su corazón para que nadie la haga daño a Paul le cuesta mucho convencerla para que -por ejemplo- tengan una cita. Paul no es como lo pintan; es un hombre atractivo y cautivador, casi perfecto en todo lo que hace, ha criado él solo a su hija Lorena y ha demostrado que puede con todo lo que se le ponga por delante. Si os soy sincera a pesar de que Paul me ha gustado bastante, ha llegado un momento entre medias del libro que ha perdido muchísimos puntos conmigo, vale que todos pueden cometer errores en un momento en el que la ira te corroe pero para mi no tiene justificación.
Los personajes que más me han gustado han sido Pizza, Lorena y los hermanos de Rebeca (Kevin y Donna). Lorena es una niña adorable y los hermanos tienen un toque de locura que me ha hecho reír.
Casi una novela es una historia divertida, amena y entretenida que guarda entre sus páginas más de una sorpresa, no obstante cuenta con partes precipitadas y otras tantas cuestiones que debilitan la trama.
*Gracias a Versátil por el ejemplar