Una época difícil para Michael; su familia se acaba de mudar y su hermana recién nacida tiene graves problemas cardíacos. Un día, en el sucio y destartalado garaje de su nueva casa, descubrirá un inquilino muy extraño. Un anciano harapiento llamado Skelling que se convertirá en un amigo muy especial. Michael y su nueva vecina, Mina, compartirán el secreto de la existencia de este misterioso ser que cambiará para siempre la vida del protagonista y de los suyos.
Este libro tenia que leerlo si o si por varias razones. Primera porque los libros que saca Nube de tinta me encantan y nunca me defraudan, segunda por esa portada tan bonita (soy bastante superficial y me dejo llevar por las apariencias) y tercera porque al leer la sinopsis me recordó a un libro que leí hace años. Con esto último me lleve una grata sorpresa, porque al empezar a leer el libro me di cuenta que era el mismo libro que ley en mi infancia y que me enamoro por completo; fue un libro que se grabo a fuego en mi memoria y en mi corazón, lo malo es que perdí el libro y con ello la esperanza de poder volver a leerlo porque no me acordaba del titulo, ni del autor solo me acordaba del argumento, así que me emocione mucho cuando me di cuenta de que “Alas para un corazón” era ese libro que tanto me había marcado y significado para mi ya que había sido un regalo muy especial.
"Pensé que estaba muerto. Se encontraba sentado con las piernas estiradas y la cabeza apoyada contra la pared. Estaba cubierto de polvo y telas de araña, como todos los demás objetos, y la cara se le veía chupada y pálida. Tenía moscardas muertas por el pelo y los hombros. Le iluminé el rostro blanco y el traje negro con la linterna."
No esta siendo nada fácil para Michael adaptarse a tantos cambios. Ha tenido que mudarse y dejar atrás su antiguo hogar para irse a vivir a una casa destrozada, donde todo es un caos y encima su hermana recién nacida esta enferma y pasa más tiempo en el hospital que en casa pero cuando Michael se atreve a adentrarse en el oscuro y peligroso garaje descubre a un hombre agazapado, un tanto huraña y desaliñado que cambiara el destino del muchacho y el de su familia.
A pesar de que la historia es bastante sencilla y no tiene mucho argumento, porque sobre todo habla de Michael y su familia, el enigmático Skelling -el hombre del garaje- y la amistad que se inicia entre Michael y su vecina Mina. No es una historia que evolucione mucho más allá, pero tiene ese halo mágico que le da a la historia esa singularidad y diferencia para que un libro llegue a enamorarte o no, y esta desde luego tiene ese toque que marca la diferencia. Estamos ante un libro narrado por un niño, por lo que aporta la inocencia de la edad, pero no es un libro infantil puesto que habla de temas como la muerte, la soledad o la amistad y el amor.
Es la segunda vez que lo leo y pensé que ahora no me gustaría tanto pero no ha sido así y me ha hecho mucha ilusión reencontrarme con el adorable e imaginativo Michael y el entrañable Skelling, ha sido como volver atrás en el tiempo y lo he disfrutado como una enana llena de esperanza, con deciros que lo devore en una tarde….
"-Dicen que los omóplatos era donde antes tenías las alas, cuando eras un ángel -dijo-. Dicen que, algún día, volverán a salirte en ese mismo sitio."
Algo que me gusta mucho de este libro es la mezcla entre la realidad y la fantasía que el autor logra introducir con naturalidad y no se hace extraño sino encantador, como si todo pudiera ser posible.
Los personajes no pueden ser más adorables. Tenemos a Michael desde el que conocemos la historia y por lo tanto también le conoceremos más a él que a cualquier otro, porque el autor no perfila demasiado a los demás personajes, los deja algo planos. Michael es un niño valiente, curioso y muy insistente, a lo largo del libro veremos como Skelling le enseñara mucho sobre la vida sin que el se de ni cuenta. Mina es una niña muy inteligente, a la que le encantan estudiar cosas sobre pájaros y la poesía, es algo rara, pero tiene un gran corazón y acompañara a Michael a donde sea porque es una gran amiga. Por el otro lado tenemos a Skelling que es un vagabundo harapiento y un tanto hosco, pero que según vas conociéndoles de la mano de los niños iras descubriendo todo lo que se esconde tras esa apariencia.
"- Todavía somos polluelos -continuó Mina-. Felices la mitad del tiempo y la otra mitad asustados."
Como dato deciros que hay fragmentos de poesías y varias menciones a William Blake, un pintor y poeta que marca el estilo de vida de Mina. Así que hay fragmentos muy bonitos y frases preciosas.
Alas para un corazón es un libro lleno de fantasía, ternura e inocencia.
*Gracias a Nube de tinta por el ejemplar