Reseña Solo un deseo de Nikki Loftin

Algunos lugares son mágicos. Y algunas personas también. 

Recién llegado a una zona silvestre y aislada de Texas, Peter Stone sale a explorar los alrededores de su nueva casa, buscando la paz y el silencio que no encuentra entre su ruidosa y expansiva familia. Quizás sea un entorno demasiado inhóspito para que un niño lo recorra en soledad, pero Peter, en ese valle soñoliento donde la magia respira y palpita, se siente a sus anchas. Sobre todo cuando conoce a la artística Annie Blythe, una niña muy especial que se ha refugiado en la belleza del valle de su dura realidad, una grave enfermedad que podría arrebatarle todos sus sueños. Arrullados por murmullo del arroyo y el siseo de la serpiente, Peter y Annie, a punto de dejar la infancia atrás, van a descubrir el verdadero alcance de la magia que los une. Porque algunos lugares poseen el poder de conceder deseos… si superamos las pruebas que nos exigen. 

Una novela lírica, delicada e inolvidable, sobre la magia de la naturaleza y el poder transformador de la amistad, que hechizará a niños y adultos por un igual.

La familia de Peter se acaba de trasladar de San Antonio a un pequeño pueblo rodeado de naturaleza, allí el niño encontrara la paz que necesita en un valle cerca de su casa. La tranquilidad y la magia del lugar conseguirá que sea el mismo por primera vez en mucho tiempo, pero en ese valle hay una niña que busca lo mismo que él, Annie, y aunque en un principio parece que la niña va a estropearlo todo con su alegría y barullo pronto descubrirán que tienen mucho en común y crecerá entre ellos una amistad única en un lugar especial.

Solo un deseo es un libro que mezcla la fantasía con la realidad tocando temas duros con una gran madurez para estar narrado por un niño de 12 años, pues la perspectiva es la de Peter y a pesar de su juventud es un buen protagonista con una voz interior que tiene poco de infantil. Es uno de esos libros que al principio no sabes muy bien por donde va a ir la historia, que andas perdido porque no te explican nada y ya estas en todo el meollo pero que a lo largo de sus páginas te va conquistando.

Nikki Loftin tiene una pluma de esas especiales que te mete de lleno en la historia, en esos paisajes entrañables y con un encanto único, al igual que sus protagonistas, que te llegan al corazón sin darte cuenta y con los que te sientes identificada. Con una prosa lírica, casi poética, que te embarca en un libro que al principio no tiene nada que resalté, que tal vez cuente con un ritmo un poco lento, y no termine de engancharte pero que al final te deja con una sonrisa en la boca por su sencillez, por el mensaje de superación y por la originalidad que hay escondida en cada palabra.

No hay muchos personajes, los principales son Peter y Annie. Peter es callado, tímido y no consigue encontrar a nadie que le comprenda. Luego Annie es diferente en muchos aspectos, es alegre, tiene una fuerza brutal, inteligente y muy imaginativa. Pero surge entre ellos una amistad maravillosa, se apoyan y se entienden descubriendo la de cosas que tienen en común, esa amistad es uno de los ingredientes principales del libro. También están los padres y las hermanas de Peter, Doug y Jake, dos hermanos peligrosos que viven cerca de Peter y la señora Empson, la  dueña del valle. A los personajes se les llega a conocer muy bien, son muy realistas y creo que esto se debe al entorno en el que se desarrolla la historia y a que al contar con tan pocos personajes se puede profundizar más en ellos.

Mágica, original, bien ambientada, con unos personajes especiales y un mensaje de superación y amistad maravillosos.