Reseña Robinson Girl de Rocío Carmona

El día de su decimoctavo cumpleaños, y después de una fiesta de la que no recuerda casi nada, Ona despierta en una playa desconocida y paradisíaca. Tras varias horas caminando en un paisaje solitario, descubre que se encuentra en lo que parece una isla desierta y, enormemente desconcertada, acaba por rendirse a la evidencia: ha naufragado.

Pero muy pronto se dará cuenta que no está sola: Domen, un joven de aspecto delicado y de extraño comportamiento, la acogerá en su guarida y le descubrirá los inquietantes misterios de la isla...

Rocío Carmona para mí es una autora imprescindible y no podía dejar pasar la oportunidad de leer éste libro suyo. Además esa portada de estilo vintage y la premisa de una lectura un poco apartado de lo que nos ofrece ahora mismo la literatura juvenil, con una chica perdida en una isla desierta y un amor sencillo me atraía muchísimo.

Ona se despierta la mañana de su 18 cumpleaños en una isla desierta, sin saber como ha llegado allí, lo único que recuerda es que estuvo de fiesta con sus amigos para celebrar su cumpleaños y poco más. La angustia que siente al verse pérdida y sola, sin saber como ha llegado ni como abandonar la isla la deja sin muchas opciones. 

Por eso cuando ve a un chico más o menos de su edad que parece un salvaje, se da cuenta de algo; estaba equivocada porque en esa isla no esta sola, en ella habitan 5 jóvenes más, muy diferentes entre si y con unas historias detrás que poco a poco conocerá y la harán querer saber más cosas sobre el misterio que entraña la isla. Para ello contara con la ayuda de Domen, un joven atento y reservado con el que vivirá momentos inolvidables.

"Mañana habrá amor para el que nunca ha amado, y para el que ama habrá mañana amor."

La historia esta  dividida en dos partes. En la primera Ona tendrá que asimilar su nuevo entorno, conocerá a los demás habitantes y se adaptara a lo que es su vida en la isla descubriendo pequeñas cosas sobre ésta. En la segunda parte todo se desvela y el misterio sale a la luz, sorprendiendo al lector por lo que realmente pasa y sobre todo por como se desarrolla todo a partir de ese momento. Me han gustado ambas partes, aunque la primera al ir perdidos y sin apenas datos, se hace algo más lento; y la segunda en cambio me ha atrapado por completo pero me ha parecido que todo lo que pasaba era muy precipitado. Así que aunque haya cositas en cada una de las partes que no hayan terminado de gustarme en general la impresión que me ha dado el libro ha sido muy buena, porque Rocío Carmona nunca decepciona.

Y es que a pesar de todo la historia esta contada con tanto tacto, con palabras tan dulces y bonitas y con tanto sentimiento que es imposible no caer rendido ante la pluma y la historia. Porque la historia nos da mucho más de lo que se ve a primera vista, siendo al final una novela que nos hace pensar y nos deja con esa desazón y esperanza que solo un buen libro suele conseguir.

-Eres el primer chico al que conozco que se conforma con un beso y luego se pone a cocinar y a tocar la guitarra como si nada -comenté con fingida inocencia.

Domen sonrió, no con expresión de niño, sino con otra algo más triste que le hacía parecer mayor.

-Todavía no eres consciente del tiempo de la isla, ¿verdad? -preguntó sin dejar de tocar.

-No sé a qué te refieres.

-Aquí necesitamos encontrar algo especial para llenar cada día. Si quemamos de una tacada todas las cosas bellas, en lugar de un paraíso esto se convertiría muy pronto en un infierno.

Algo bueno que tiene es que engancha mucho y se lee en nada, y mucha culpa la tienen ese misterio que envuelve a la isla y los capítulos cortos con los que te envicias y piensas que por uno más no pasa nada y acabas terminándote el libro en unas horas sin darte ni cuenta. Asimismo tiene unas descripciones maravillosas, te ves en esas arenas blancas, entre las palmeras cogiendo cocos  o nadando en el mar mientras miras el cielo azul y despejado.

Los personajes me han resultado creíbles y como he dicho antes son muy dispares entre si. Ona es a la que más conoceremos porque es la que nos cuenta su historia, no solo en la isla sino de cómo era su vida antes, cosas sobre su novio, sus padres o la angustia que la asfixiaba sin saber el porque. Domen en cambio se queda más en un misterio, porque aunque conocemos pequeños retazos de su infancia y algo de su presente nunca habla mucho de sí mismo. La relación que se empieza a forjar entre ellos me ha gustado porque tiene el toque justo de dulzura y pasión, pero me ha parecido un poco precipitada, aunque al final lo llego a entender por donde están atrapados. También están Nelson, Eric, Linda y Anna, que son los demás habitantes de la isla. 

Sin pensarlos dos veces, acerqué mis manos a su rostro y lo besé lentamente. Él me correspondió, y durante un momento delicioso nuestros labios se fundieron. Los de Domen sabían un poco a sal.

—¿Por qué has hecho eso? —preguntó luego en voz baja.

—Para que tengas algo con lo que alimentar tus sueños.

Si nos centramos en las cosas que no me han llegado a convencer creo que tiene mucho que ver con el grosor del libro, por eso todo tiene un toque de rapidez y parece como que todo lo que le cae encima a la protagonista lo asimila sin más. Eso es lo único que no me ha gustado y por lo que al final no me ha parecido un libro perfecto, porque debo reconocer que al final me hasta me emociono con ese final tan único. ¿Tal vez Rocío Carmona tenga pensado una segunda parte? Pues si es así no lo voy a dudar ni un instante a la hora de leerlo, aunque el final lo veo bastante cerrado y dejando que el lector intuya algo más esperanzado.

Robinson girl es un viaje difícil y precioso donde poder pararnos a pensar y descubrir cosas que hasta el momento habíamos ignorado. Una historia tierna y cruda sobre el amor, la belleza de la vida y las segundas oportunidades que ésta nos ofrece.